La Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES), que se identifica como una plataforma de entidades sociales que trabaja contra la pobreza y la exclusión social en los países de la Unión Europea, ha publicado su Informe anual “El Estado de la Pobreza”. Un documento robusto, complejo y denso que se esfuerza en mostrar (desde múltiples enfoques), la realidad y los detalles específicos del origen de la información, fechas de referencia y elaboración del Informe, explicadas con mucho detalle que permiten entender y usar los datos de forma adecuada y confirmar el rigor de su elaboración.
El Informe incluye un documento específico territorializando la información para tratar de hacer posible valorar la cohesión territorial, entendida como la capacidad de un país para garantizar el bienestar de todas las personas con independencia de la parte del territorio donde residan. En España, desde hace muchos años existe una gran diversidad, que queda reflejada en la práctica totalidad de indicadores utilizados para las medidas de la pobreza, exclusión y vulnerabilidad, siendo un factor clave para el incumplimiento de los Objetivos comprometidos por España en las Estrategias y Planes contra la pobreza, nacionales, europeos e internacionales.
Poniendo atención a los datos correspondientes a Canarias, el Informe señala que el Archipiélago es la segunda comunidad autónoma con mayor proporción de personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social 36,3% (índice AROPE), más de 1/3 de la población.
Adicionalmente, el Archipiélago es la comunidad con la segunda peor tasa de riesgo de pobreza severa (13,2%) y con el 29,4% de riesgo de pobreza (como consecuencia de tener el mayor incremento de este parámetro a nivel del Estado). Presentando así mismo, los peores datos de tasas de privación material y social severa y de proporción de personas en hogares con baja intensidad laboral (a pesar de tener una mejoría en ambos parámetros en el último año).
La Agenda 2030 fijaba que en Canarias (2022) se debería haber superado el nivel del Objetivo AROPE Europa: salir 188.257 personas de la pobreza, lo que no era de especial dificultad, ya que se usaba como año de referencia 2015 (que fue el momento especialmente crítico en los parámetros indicadores de la crisis económica de 2008), sin embargo, no han llegado a 20.000 las personas que lo han conseguido.
El Informe muestra las tasas de pobreza con y sin las transferencias públicas de reequilibrio, lo que permite observar con claridad la importancia de estas ayudas para impulsar la salida objetiva de la pobreza, lo que produciría una disminución de la cantidad de personas en los niveles más severos.
El Informe presenta un gráfico de enorme nivel clarificador en el que se representan el riesgo de pobreza frente al valor del PIB per cápita (PIB/PC) calculado para 2021.
La primera información de interés que aporta es el ajuste de los puntos que representan a cada comunidad autónoma a la línea (trazada en el gráfico con líneas discontinuas), el ajuste obtenido R2=0,8374 (dada la naturaleza de los parámetros representados) indica una extraordinaria correlación de la posición de los puntos respecto de línea.
Lo que simplificando viene a señalar que el riesgo de pobreza en cada comunidad está determinado de forma clara por el PIB/PC, de forma que se puede estimar que por cada 1.100€ de aumento del PIB/PV se disminuye un punto porcentual el riesgo de pobreza. Obviamente esto sería directo si los puntos representativos de todas las comunidades autónomas estuvieran situados sobre la línea ajustada (como sucede en el caso de Canarias, Aragón, Cataluña o el País Vasco).
Sin embargo, hay puntos representativos de comunidades que están situados por encima o debajo de la línea ajuste, lo que pone de manifiesto la segunda información de interés que aporta el gráfico: Para un mismo nivel de PIB/PC en el que se encuentra Canarias, Andalucía y Extremadura, estas dos últimas tienen más alto el índice de pobreza (más de cuatro puntos) o en sentido contrario como Navarra con un PIB/PC en torno a 2.000 o 4.000€ (inferior a Madrid o al País Vasco), tiene el índice de riesgo de pobreza más bajo del país (entre 3 y 5 puntos inferiores a aquellas Comunidades).
Es claro qué la disminución de la pobreza como un objetivo específico de cada comunidad y como objetivo de cohesión territorial nacional tiene dos líneas de trabajo claras: La primera, mejorar los “mecanismos de distribución” que pueden conseguir mejoras importantes (hasta el 5% de disminución de los niveles para los mismos niveles de PIB/PC) y la segunda: Impulsar el “crecimiento económico” que puede permitir hasta el 20% de disminución del riesgo de pobreza.
Esta visión que aporta el gráfico viene a mostrar dos posibilidades claras de conocimiento común y general, pero que están siendo sometidas a discusión en los últimos años:
El objetivo es hacer crecer el PIB lo más posible y repartir en cada momento el PIB generado, o si el crecimiento del PIB debe ser sujetado por razones de “orden superior” derivadas del impacto ambiental o de la finitud de los recursos y repartir la cantidad resultante.
La situación de Canarias es objetivamente tan penosa (cómo consecuencia de los altos valores de todos los índices de pobreza y del nivel de PIB/PC, que se sitúa en el límite inferior de valores del conjunto de comunidades autónomas españolas), que la respuesta es radicalmente evidente: Hay que mejorar el reparto e impulsar el crecimiento.
Las herramientas y procedimientos para mejorar el reparto están fuera del alcance del contenido de estas páginas, pero el impulso y promoción del crecimiento son su razón de ser (Crecimiento Azul), entendido y enfocado como corresponde a la experiencia y nuevos conocimientos disponibles.
La historia del crecimiento económico sin referencias ha producido y sigue produciendo ejemplos claros de efectos sociales y medioambientales lamentables, disparatados e injustificables. Sin embargo, este conocimiento es el que se debe convertir en el núcleo del crecimiento económico necesario, para dotarlo del respeto e impulso de la conservación y mejora del medio ambiente, la equidad social y la responsabilidad intergeneracional.
Estos condicionantes deben ser parte de los desafíos a resolver y de las oportunidades que pueden y deben ser aprovechadas. En realidades complejas como la de Canarias, se hace posible que el resolver los problemas para generar el crecimiento que den soporte económico para la mejora de la situación social que las cifras del informe muestran, sea el mejor antídoto contra la resignación frente a la realidad objetiva actual y la plataforma más adecuada para impulsar una sociedad medioambiental, social y económicamente avanzada.